en la misma boca donde se concentran
la muerte y la fertilidad
allí
me esperan las manos
y las simientes de los ojos
cegados de alcohol y luz
mi ceguedad es una mesa sin ventanas
mi ceguedad de manos que se arrastran
tiene que encontrar
una deuda donde saldarse
una naturaleza muerta
sin santos
ni ramas de venas
que den comienzo a una vida nueva
es esa boca
el comienzo de todas las cosas
el principio del dolor y su concepto
el final del estigma
el brote de sangre
hecho flor
y deshojándose en la explosión
de unos ojos abiertos y su condena
y mi condena será una noche sin ojos
una muerte sin vida que llevarse
el llanto en el cuenco
donde vomito mi fertilidad
y mi muerte
«Fui a los bosques porque quería vivir a conciencia. Quería vivir a fondo y extraer todo el meollo a la vida; olvidar todo lo que no fuera la vida para no llegar a la muerte descubriendo que no había vivido.»
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