Pequeña y blanca magia abrazada por mantos azules.
Belleza y barcas atrapadas entre costas y calas.
El pedregoso fin del mundo...
... y la puesta de Sol, como una erupción de las montañas.
Breve explicación gráfica de lo que fue el verano de 2010, en Girona.
Por orden: Cadaqués, Portlligat, Cap de Creus y volviendo de la Selva de Mar.
ResponderEliminarPura magia.
no dudes en volver
ResponderEliminarsaludos
Ya estoy deseando hacerlo.
ResponderEliminar¡Un saludo!
Yo estoy medio desterrada en Girona... Estudio en la Universidad de allí.
ResponderEliminarBesos!
Preciosas imágenes, Judith.
ResponderEliminarMuchísimas gracias :)
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